Por Ignacio Carbajal, especial para SinEmbargo
Ciudad de México, 9 de febrero (SinEmbargo/Blog Expediente).– «Mis compañeros me dijeron que afuera había unas personas que posiblemente me andaban buscando, y para que no me fueran a secuestrar o a disparar, mejor me salí por una ventana», relató el periodista de nota roja, Daniel Orozco, del diario La Red, ante el Ministerio Público.
El reportero señaló en las instalaciones de la Fiscalía Regional del Estado que desde hace varios días recibe llamadas y mensajes intimatorios después de haber sostenido un altercado con un policía veracruzano durante la cobertura del hallazgo de unas fosas clandestinas en la colonia Veracruz, de las que exhumaron seis cadáveres.
En el expediente se asentó que pasado 4 de febrero el comunicador fue agredido física y verbalmente por un elemento de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) cuando hacía cadena de custodia a personal de la Fiscalía para colocar los cadáveres encontrados en una unid del Forense.
«Los peritos, con tal de esconder los cuerpos, se fueron retirando de donde los sacaron de la tierra, allá los fui a seguir con otros compañeros, y a mí un policía me dijo que no podía pasar. Entonces, le dije que sacaría la foto, que solo querían ocultar la verdad y que necesitaba la foto. El oficial me dijo que no podía, que me iba a disparar y a romperme la madre. Entonces me intenté meter, y él me agarró de la camisa y como no pudo, me la jaloneó hasta romperla», dijo ante el MP.
El joven relató que a raíz de ese hecho, el mismo día, recibió una llamada desde un número desconocido en donde le advertían: «bájale de huevos porque te vamos a romper la madre. Ya te tenemos ubicado».
Al día siguiente, cinco de febrero, el joven asistió a la marcha para conmemorar un año del secuestro y muerte del periodista Gregorio Jiménez de la Cruz, y expuso su caso «en corto» con varios periodistas presentes.
Para la noche, ya tenía en su número más mensajes intimatorios, «te vamos a romper la madre, por hocicón».
El día seis, las llamadas del número de donde recibió el primer aviso no paraban, «toda la noche me estuvieron marque y marque, pero no respondía».
El siete aparentemente la pasó en calma y en reuniones con otros reporteros y la familia, poco a poco se estaba tranquilizando.
Pero el día ocho, al rededor de las dos de la tarde, cuando se presentó a la delegación de la Cruz Roja en busca de información, notó que dos sujetos lo seguían de cerca.
«Salí por una golosina y los vi, los noté muy cerca de mí, le comenté a mis compañeros, dentro de la oficina que nos prestan en la Cruz Roja, y ellos me recomendaron salirme por una ventana».
El joven se aventó por la ventana, pero del otro lado «ya había una persona que me comenzó a seguir». El chico relató que pensó lo peor y comenzó a correr a lo largo de una calle en línea recta, hasta perderse en los vehículos.
Al llegar a las esquinas de Escutia y Constitución, se metió a un negocio y allí aguardó un poco. Dice que notó la presencia de los sujetos y además iban abordo de un taxi con el cual presume pensaban llevárselo por la fuerza.
Expuso que apenas pudo, se salió y marchó a casa. En la denuncia se asentó el testimonio de otros periodistas quienes se percataron de los hechos.
El periodista no dudó en señalar una posible correlación entre el problema con el elemento de la SSP en la fosa de la colonia Veracruz y las agresiones.
Incluso, minutos después de haber finalizado su declaración, la SSP emitió un comunicado en donde se dijo dijo que «coadyuvará con las autoridades ministeriales para que se esclarezca el caso».
En entrevista previa, Daniel Orozco lamentó la lentitud de la Comisión para la Atención de los Periodistas en su caso, pues tenían programado llevarlo a denunciar hasta el lunes a mediodía, sin embargo ante la presión en redes sociales, la presidenta del organismo, Benita González aceleró el proceso y expediente se abrió desde el domingo a las siete de la noche.
Benita González indicó que se le dará todo el apoyo para que se resuelva la situación, y ante todo, la exigencia es investigar de inmediato los números telefónicos y el posible mal comportamiento de personal de la SSP.
Actualmente Veracruz es considerado por Reporteros Sin Fronteras y Artículo 19 como el peor estado para ejercer el periodismo. Su Gobernador, Javier Duarte de Ochoa, suma el «récord» de 11 periodistas asesinados y otro tanto desaparecidos y exiliados. El último caso, el de Moisés Sánchez Cerezo, sustraído de su vivienda el día dos de febrero por un grupo de sujetos armados que le dieron muerte.